Comer bien, disfrutar y compartir

¿Qué significa comer bien? Es algo que todos los amantes de la gastronomía nos hemos preguntado al menos una vez en la vida. Cuándo empiezo a plantearmelo siempre viene a mi mente esta cita desde una cajita pérdida de la memoria:

“¡Qué pena que beber agua no sea un pecado! ¡Qué bien sabría entonces!”

¿Es esta cita de un famoso chef profesional? No, es de Giacomo Leopardi, poeta italiano, que nos sugiere dejar al lado las preocupaciones y disfrutar un poco más cuando pensamos en comer bien.

¿Y qué diría Salvador Dalí del comer bien?

Pocos saben que el famoso y genial artista del surrealismo nacido en Figueres era un amante apasionado de la gastronomía, y que existe una obra de literatura gastronómica escrita por el propio Salvador Dalí, “Las cenas de Gala”, homenaje al disfrute gastronómico en todos sus sentidos. Completa la obra del genio también “Los vinos de Gala”, donde el artista y provocador genio clasifica los vinos que bebe con su musa a través de una categorización multisensorial que se ha hecho famosa entre los amantes de la cocina y los cocineros profesionales del otro lado del charco.

Comer bien significa comer acompañado

Puede ser una cena romántica a domicilio, puede ser una celebración especial en familia, o simplemente una comida entre amigos, lo importante es estar en buena compañía. La lingüística nos ayuda, compañero, del latín cum panis, quiere decir “aquél con el que comparto mi pan”. Pero ¿Por qué? Porqué hay una diferencia brutal entre alimentarse y disfrutar de un momento único entre amigos y familia.
Está probado que al comer bien en compañía se asocia la socialidad, la atención a los ingredientes y las sobremesas que ayudan nuestra digestión, como detalla el doctor José Manuel Moreno, pediatra del hospital universitario 12 de Octubre de Madrid.

Comer bien: se trata de cuidar

Dedicar tiempo y cariño al preparar una celebración, llamar un chef a domicilio, tienen mucho que ver con la forma de cuidar de los detalles y de acoger las personas. ¿Os imagináis que os invitan a celebrar un cumpleaños y nadie se ha preocupado de que haya una buena comida?
Hace mucho tiempo una mujer me dijo: “en una fiesta familiar si la gente come mal se acuerda perfectamente.” Y de eso no cabe la menor duda…

Comer bien es cultura y conocimiento

La cocina mediterránea tradicional es parte de nuestro ADN, no se puede negar, los clásicos que siempre sorprenden son un patrimonio de nuestro gusto, pero ¿qué impide ir un poco más allá de las columnas de Hércules?
Comer bien significa también abrirse a cocinas exóticas, curiosos de sabores que nunca hemos probado y listos para aceptar algo diferente, significa salir de nuestra zona de confort gastronómica y hacer el ejercicio mental de pensar que comer bien significa también tener curiosidad hacia el otro, dejarse llevar por los sabores que nos propone otra cultura, un cocinero profesional de otra tierra.

3 reglas fundamentales del comer bien que todos deberíamos conocer y aplicar:

1) No cubrir los sabores. Exceder en salsas o en especias puede causar el efecto colateral de matar el sabor del plato, dejando solo el de la salsa acompañante.
2) Fijarse en las texturas de los platos y no tener miedo en encontrar contrastes. Una diatriba abierta es la de los arroces. Una paella es diferente de un risotto, que siempre tiene que quedar meloso. Un punto crujiente bien se acompaña a la textura sedosa de una tartare y una tarte tatin bien encuentra su contraste en el helado.
3) Distinguir en los puntos de cocciones. Una tataki siempre irá un poco rosada dentro y un filete de pollo es importante que esté bien cocido.

Pero seguramente la regla más importante es disfrutar con los tuyos.

¿Y tú a que esperas a comer bien con nuestros menús ?

 

Autor - Manuela Pirrone para Chef a domicilio

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